Por Silvia Hopenhayn
En varios relatos de Cortázar se combinan elementos narrativos propicios para el cine o, como diría Deleuze, para la imagen-movimiento. Justamente por su modo “fantástico” de darle movimiento a las imágenes, alterando los tiempos. También la escritura sensorial, para un buen cineasta como Antonioni, por ejemplo, es un atractivo. “Las babas del diablo”, el cuento de Cortázar que integra el volumen “Las armas secretas”, de 1956, fue llevado al cine por el director italiano, felizmente sin rigor adaptativo. Quiero decir: Antonioni hizo su película, o la película de su lectura. No es un guión que responde a la transcripción del texto, tampoco es una recreación. Es la invención de una lectura cinematográfica del cuento de Cortázar. Ya el título es distinto, “Blow up” (que además tendrá su secuela o tercera lectura, en la versión “Blowout”, con John Travolta, dirigida por Brian de Palma).
La trama del cuento, en el film de Antonioni, está completamente alterada, ocurre en Londres, con chicas que son modelos y eso se presta a todo un juego erótico que no aparece en el relato de Cortázar… Sin embargo, la amenaza sexual contenida, la extrañeza, el misterio, el descubrimiento fotográfico, sí están. El director no reproduce la historia, sino sus sentidos, como si captara la respiración del texto. Algo notorio: la presencia del viento. En el cuento de Cortázar, el viento es casi un personaje. Antonioni parece haberlo escuchado al leer el cuento, toma ese elemento como indicio esencial. Y por supuesto, el carozo del cuento de Cortázar también está: la fotografía como captación imprevista del ojo, lo que se registra sin recordar.
Hay varias adaptaciones de cuentos de Cortázar (no tanto de sus novelas), como las de Manuel Antín, sobre todo la de un cuento formidable del autor, “Cartas de mamá”, llevada al cine bajo el excelente título “La cifra impar”. Y Jean LucGodard eligió “La autopista del sur” para hacer su película “Weekend” en 1967.
Lecturas
En Casa de Letras vamos a leer juntos “Las babas del diablo”, “La autopista del sur” y el brevísimo relato “Continuidad de los parques”, teniendo en cuenta la dinámica visual propia del texto y su circularidad. El caso de “Continuidad de los parques” es notable; parece que una cámara estuviera registrando el texto y al final… ¡se convirtiera en un personaje que fagocita al lector!
No quiero adelantar más para seguir juntos en esta travesía de lectura cortazariana.
El curso de lectura “Cortázar y el cine” comenzará en Casa de Letras el martes 4 de noviembre de 12 a 14 hs. Consistirá en cuatro encuentros y estará seguido por el curso de lectura “Felisberto y la música”, también a cargo de Silvia Hopenhayn. Informes e inscripción al (54 11) 5352-3355 o a info@casadeletras.ar.