“Escribir no es para nada un trabajo… Y cuando la gente me cuenta de cuán doloroso es escribir no lo entiendo, porque es como bajar por la montaña, sabes… Es liberador. Es disfrutable. Es un regalo y te pagan por lo que haces.
“Escribir es como ir a la cama con una mujer hermosa quien después de levantarse, va hacia su bolso y me da un puñado de dinero. Lo tomo.
“Nunca redacto por la mañana. No me levanto por la mañana. Bebo durante la noche. Trato de permanecer en cama hasta las 12 en punto, esto es mediodía. Usualmente si tengo que levantarme más temprano, no me siento bien el resto del día. Me asomo, si dice doce entonces me levanto y mi día comienza. Como algo y luego usualmente corro directo a la pista de carreras luego de levantarme. Apuesto a los caballos, luego vuelvo y Linda cocina algo y hablamos un rato, comemos, y nos tomamos algunos tragos, y luego subo las escaleras con un par de botellas y redacto, comenzando alrededor de las nueve y media sin parar hasta la una y media o dos y media en la madrugada. Y eso es todo”.
Fuente: Culturamas