Por Joyce Carol Oates
1. No esperes un “lector ideal”. Puede haber uno, pero está leyendo a otro.
2. No esperes un “lector ideal” —a excepción, tal vez, de ti mismo, en algún momento del futuro.
3. Sé tu propio editor y crítico: comprensivo, pero ¡sin piedad!
4. A menos que estés escribiendo algo muy vanguardista —retorcido, enmarañado y oscuro— valora la adecuada división en párrafos.
5. A menos que estés escribiendo algo muy postmodernista —autoconsciente, autoreflexivo y sugestivo— valora la posibilidad de utilizar palabras familiares y sencillas en lugar de altisonantes palabras polisílabas.
6. Ten presente a Oscar Wilde: “Un poco de sinceridad es peligrosa, y mucha es absolutamente fatal”.
7. Mantén la esperanza. Pero espera lo peor.
Fuente: Sinjania