Por Toni Morrison
“Para lo que yo necesitaba permiso no era para escribir, sino para triunfar”.
“Al principio, escribir antes del amanecer fue una necesidad: cuando empecé a escribir mis hijos eran pequeños y necesitaba aprovechar el tiempo antes de que me llamaran, que era siempre sobre las cinco de la mañana. Muchos años más tarde, cuando dejé de trabajar en Random House, me quedé un par de años en casa. Descubrí cosas de mí misma en las que no había pensado nunca. Al principio no sabía cuándo quería comer, porque siempre había comido a la hora del almuerzo, la cena o el desayuno. El trabajo y los niños habían impulsado todos mis hábitos… No conocía los sonidos de los días de semana de mi propia casa; todo me hizo sentir un poco mareada”.
“Hace poco hablaba con una escritora que describió algo que hacía cada vez que iba a su escritorio. No recuerdo exactamente cuál era el gesto, hay algo en su escritorio que ella toca antes de golpear el teclado de la computadora, pero comenzamos a hablar sobre los pequeños rituales que uno hace antes de comenzar a escribir. Yo, al principio, pensé que no tenía un ritual, pero luego recordé que siempre me levanto y preparo una taza de café cuando aún está oscuro, debe estar oscuro, y luego bebo el café y miro cómo llega la luz del día. Y ella dijo: “Bueno, eso es un ritual”. Y me di cuenta de que para mí este ritual representa mi preparación para entrar en un espacio que sólo puedo llamar no secular. . . Todos los escritores idean formas de acercarse a ese lugar donde esperan hacer el contacto, donde se convierten en el medio o donde se involucran en este misterioso proceso. Para mí, la luz es la señal en la transición. No es estar en la luz, es estar ahí antes de que llegue. Me habilita, en cierto sentido. Les digo a mis alumnos que una de las cosas más importantes que necesitan saber es cuándo están en su mejor momento, creativamente. Necesitan preguntarse: ¿Cómo es la habitación ideal? ¿Hay música? ¿Hay silencio? ¿Hay caos afuera o hay serenidad afuera? ¿Qué necesito para liberar mi imaginación?”