Coordina: Guillermo Piro
Duración: 6 encuentros
Día y Horario: jueves de 19.45 a 21.45 hs
Inicio de clases: 7 de octubre
Modalidad: Videoconferencias
Taller de lectura
A partir de la novela El último hombre, de Mary Shelley (1797-1851), publicada en 1826, donde narra el fin de la humanidad a causa de una peste, se inaugura en la literatura de Occidente un subgénero fantástico con pocos ejemplos: la literatura escrita por el último sobreviviente. En el caso de Shelley, su novela concluye cuando el narrador comprueba que le espera una vida de soledad, en un mundo devastado sin remedio.
Matthew Phipps Shiel (1865-1947) retoma la idea, con La nube púrpura (1901), de un final repentino de la humanidad al que sobrevive un solo hombre, el narrador, que se obstinará, por diversión, en el incendio de ciudades enteras, en la fabricación de castillos de oro y en el hallazgo de otro sobreviviente.
A Shiel seguirán George R. Stewart (1895-1980), con La Tierra permanece (1949) y Arno Schmidt (1914-1979), quien en 1951 publica Espejos negros, una variante pesimista a las expectativas esperanzadoras planteadas por Shiel y Stewart. Richard Matheson (1926-2013) aportará con Soy leyenda (1954) un abordaje original, concibiendo la idea del último hombre en un mundo poblado de vampiros. Marlene Haushofer (1920-1970), más cerca de Schmidt, se incorporará al subgénero con El muro en 1963. Y a ella seguirán Guido Morselli (1912-1973), con Dissipatio H.G. (1977) y Max Frisch (1911-1991), con El hombre aparece en el Holoceno (1979). Y por último, más recientemente, Cormac McCarthy (1933) con La carretera (2006).
La idea del curso es revisar fragmentos de esas obras, aproximándolas y confrontándolas, teniendo en cuenta que ningún autor se aventura en su propia ficción sin el conocimiento de las que lo preceden.